"La asamblea de los muertos" de Julia Escobar es nuestro libro de hoy.
He de reconocer - muy a mi pesar - que el título me sobrecogió cuando tuve este libro entre mis manos. Me instó su delicada dedicatoria de la autora hacia mi persona y empecé a leerlo muy de mañana, cuando el sol entraba por la ventana de mi oficina llenando de luz y claridad. Desde sus primeras páginas me cautivó hasta el punto de no parar hasta terminarlo y solo me alumbraba por una lámpara cercana al ordenador, dando el efecto que la obra merecía. Una preciosa historia y reflexiones que nos brinda Julia Escobar; escritora y poeta.
SINOPSIS:
EL número de muertos es incalculable. Corresponde al de todas las personas que han existido desde el comienzo de los tiempos hasta nuestros días, sin que sepamos bien en qué momento empezaron dichos tiempos. Es más, cuando la comunidad científica cree haber conseguido el dato definitivo que puede zanjar de una vez por todas esta inquietante cuestión, aparece un fósil en alguna parte que hace retroceder la fecha y nuevamente se desbaratan las estadísticas. Pero si conocer el número exacto de seres humanos que han poblado el planeta es un gran enigma, aún lo es mayor el planteado por su destino una vez acaecido el óbito. Nadie ha sabido contestar todavía de manera concluyente -o al menos convincente- a la gran pregunta: ¿de dónde venimos?, pero las respuestas a la otra gran pregunta, ¿adónde vamos?, son tan sorprendentes como variopintas. En este más allá que yo imagino, el individuo, al morir, se encuentra desasistido por completo. Por eso cuando, por así decirlo, "cobra conciencia" de su estado, el sujeto busca desesperadamente compañía y la encuentra gracias a la convocatoria (¿ritual, aleatoria, permanente?) de las asambleas. Con este libro no pretendo más que hacerme eco de mis obsesiones, reírme de mis propios temores (en definitiva, darle un susto al miedo) y echar mi cuarto a espadas en la espinosa polémica de la supervivencia después de la muerte, incurriendo en ese oxímoron, ese "absurdo ingenioso" que supone el hecho de querer materializar un más allá representable y coherente. Yo concibo la muerte como un extraño y lejano país al que habrá que acudir en algún momento. Una tenebrosa región de soledad y de sombras donde, como en las antiguas posadas españolas, sólo encontraremos lo que llevemos puesto.
BIOGRAFÍA:
Julia Escobar (1946,Madrid) estudió filología clásica y se dedica desde entonces a la traducción en todas sus facetas, destacando, sobre todo, sus traducciones del francés. Tras haberse dedicado a la poesía, en 1999 publicó su primera novela Nadie dijo que fuera fácil con la que demostró sus cualidades como narradora.
Madrid, ciudad donde realizó sus estudios, primero en el Liceo Francés y después en la Facultad de Filosofía y Letras (Filología Clásica). Muy pronto se dedicó a la traducción, trabajando para organismos internacionales y editoriales y en 1980 empezó a colaborar asiduamente en la prensa y en la radio, actividad que prosigue en la actualidad.
Desde 1995 da clases de traducción literaria en diferentes centros universitarios españoles y extranjeros. También ha sido librera y editora.
En 1981 ganó el Premio Francisco de Quevedo de poesía del Ayuntamiento de Madrid con Fluyen Permanentes. Diez años después publicó su segundo poemario, Tiempo a través, y en 1999 su primera novela, Nadie dijo que fuera fácil. Su segundo libro de prosa, La asamblea de los muertos, está a punto de aparecer en Pre-Textos.
Ha publicado también un ensayo sobre George Orwell ("El hombre que sabía demasiado" en 1984), un informe sobre la traducción y la interpretación (1993) y La traducción y la interpretación en español en El Anuario del Instituto Cervantes,1998, así como numerosos artículos sobre traducción y literatura en la prensa especializada y en el Centro Virtual Cervantes http://cvc.cervantes
Ha traducido a escritores franceses y portugueses como Colette, Jules Verne, Françoise Sagan, Henri Michaux, Francis Ponge, Edmond Jabès, Jose de Almada Negreiros, António Ramos Rosa y muchos más.
Es "Chevalier dans l'Ordre des Arts et des lettres", distinción que le fue otorgada en 1999 por el Ministerio de Cultura de Francia.
OBRAS:
El hombre que sabía demasiado. Madrid: Espasa Calpe, 1984. Ensayo.
Fluyen permanentes. Valencia: Pre-Textos, 1984. Poesía. Ganadora del Premio Francisco de Quevedo 1981Tiempo a través. Valencia: Pre-Textos, 1994. Poesía.
La traducción y la interpretación en español, 1998. Ensayo.
Nadie dijo que fuera fácil. Barcelona: Edhasa, 1999. Novela.
ENLACES:
http://laquimera.typepad.com/laquimera/
http://www.casadellibro.com/libro-la-asamblea-de-los-muertos/9788481913200/713363#modSipnosis
http://www.amazon.es/asamblea-los-muertos-Julia-Escobar/dp/8481913200
He de reconocer - muy a mi pesar - que el título me sobrecogió cuando tuve este libro entre mis manos. Me instó su delicada dedicatoria de la autora hacia mi persona y empecé a leerlo muy de mañana, cuando el sol entraba por la ventana de mi oficina llenando de luz y claridad. Desde sus primeras páginas me cautivó hasta el punto de no parar hasta terminarlo y solo me alumbraba por una lámpara cercana al ordenador, dando el efecto que la obra merecía. Una preciosa historia y reflexiones que nos brinda Julia Escobar; escritora y poeta.
SINOPSIS:
EL número de muertos es incalculable. Corresponde al de todas las personas que han existido desde el comienzo de los tiempos hasta nuestros días, sin que sepamos bien en qué momento empezaron dichos tiempos. Es más, cuando la comunidad científica cree haber conseguido el dato definitivo que puede zanjar de una vez por todas esta inquietante cuestión, aparece un fósil en alguna parte que hace retroceder la fecha y nuevamente se desbaratan las estadísticas. Pero si conocer el número exacto de seres humanos que han poblado el planeta es un gran enigma, aún lo es mayor el planteado por su destino una vez acaecido el óbito. Nadie ha sabido contestar todavía de manera concluyente -o al menos convincente- a la gran pregunta: ¿de dónde venimos?, pero las respuestas a la otra gran pregunta, ¿adónde vamos?, son tan sorprendentes como variopintas. En este más allá que yo imagino, el individuo, al morir, se encuentra desasistido por completo. Por eso cuando, por así decirlo, "cobra conciencia" de su estado, el sujeto busca desesperadamente compañía y la encuentra gracias a la convocatoria (¿ritual, aleatoria, permanente?) de las asambleas. Con este libro no pretendo más que hacerme eco de mis obsesiones, reírme de mis propios temores (en definitiva, darle un susto al miedo) y echar mi cuarto a espadas en la espinosa polémica de la supervivencia después de la muerte, incurriendo en ese oxímoron, ese "absurdo ingenioso" que supone el hecho de querer materializar un más allá representable y coherente. Yo concibo la muerte como un extraño y lejano país al que habrá que acudir en algún momento. Una tenebrosa región de soledad y de sombras donde, como en las antiguas posadas españolas, sólo encontraremos lo que llevemos puesto.
BIOGRAFÍA:
Julia Escobar (1946,Madrid) estudió filología clásica y se dedica desde entonces a la traducción en todas sus facetas, destacando, sobre todo, sus traducciones del francés. Tras haberse dedicado a la poesía, en 1999 publicó su primera novela Nadie dijo que fuera fácil con la que demostró sus cualidades como narradora.
Madrid, ciudad donde realizó sus estudios, primero en el Liceo Francés y después en la Facultad de Filosofía y Letras (Filología Clásica). Muy pronto se dedicó a la traducción, trabajando para organismos internacionales y editoriales y en 1980 empezó a colaborar asiduamente en la prensa y en la radio, actividad que prosigue en la actualidad.
Desde 1995 da clases de traducción literaria en diferentes centros universitarios españoles y extranjeros. También ha sido librera y editora.
En 1981 ganó el Premio Francisco de Quevedo de poesía del Ayuntamiento de Madrid con Fluyen Permanentes. Diez años después publicó su segundo poemario, Tiempo a través, y en 1999 su primera novela, Nadie dijo que fuera fácil. Su segundo libro de prosa, La asamblea de los muertos, está a punto de aparecer en Pre-Textos.
Ha publicado también un ensayo sobre George Orwell ("El hombre que sabía demasiado" en 1984), un informe sobre la traducción y la interpretación (1993) y La traducción y la interpretación en español en El Anuario del Instituto Cervantes,1998, así como numerosos artículos sobre traducción y literatura en la prensa especializada y en el Centro Virtual Cervantes http://cvc.cervantes
Ha traducido a escritores franceses y portugueses como Colette, Jules Verne, Françoise Sagan, Henri Michaux, Francis Ponge, Edmond Jabès, Jose de Almada Negreiros, António Ramos Rosa y muchos más.
Es "Chevalier dans l'Ordre des Arts et des lettres", distinción que le fue otorgada en 1999 por el Ministerio de Cultura de Francia.
OBRAS:
El hombre que sabía demasiado. Madrid: Espasa Calpe, 1984. Ensayo.
Fluyen permanentes. Valencia: Pre-Textos, 1984. Poesía. Ganadora del Premio Francisco de Quevedo 1981Tiempo a través. Valencia: Pre-Textos, 1994. Poesía.
La traducción y la interpretación en español, 1998. Ensayo.
Nadie dijo que fuera fácil. Barcelona: Edhasa, 1999. Novela.
ENLACES:
http://laquimera.typepad.com/laquimera/
http://www.casadellibro.com/libro-la-asamblea-de-los-muertos/9788481913200/713363#modSipnosis
http://www.amazon.es/asamblea-los-muertos-Julia-Escobar/dp/8481913200
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